Las pastas de té es uno de los productos estrella dentro de nuestra tienda y en el ámbito de la repostería. En este artículo veremos varios aspectos fundamentales de las pastas de té como es su historia, los tipos, con que bebida se acompaña, algunas preguntas habituales e incluso una sencilla receta para que las hagas tu mismo en casa.
Historia
Época antigua
Para explicar los orígenes de las pastas de hay que remontarse a la antigüedad. Más concretamente a la época clásica. Los egipcios dejaron mucha cultura, ¡y también se cree que hasta ciertas nociones de pastelería!
Usaban los edulcorantes naturales que la tierra les proveía. Tanto los egipcios, griegos y romanos cocinaban un tipo de pasta muy simple (con harina y aceite) a la que añadían miel, frutas, dátiles, nueces… Todo esto se puede apreciar en pinturas halladas en tumbas antiguas. Así como en las obras cómicas de Aristófanes.
Este tipo de pasta básica también se utilizaba como cobertura para carnes cocinadas. Lo que hacía es mantener la carne húmeda mientras se asaba. No se comía y se desechaba. La falta de otro ingrediente fundamental como es la mantequilla o manteca era lo que les faltaba para acercarse a la repostería actual.
Época medieval
Las personas esclavizadas cocinaban para sus amos, aunque también para sus propias familias.
En un origen inglés, los cocineros de los barcos necesitaban de un alimento para dar a la tripulación. ¡Pero no podía ser cualquiera! Se necesitaba que aguantase mucho tiempo durante los largos viajes en el mar. De esta forma nacieron las galletas.
Muchas de estas personas abandonaron sus tierras después de la guerra civil. Y se llevaron sus valiosas recetas con ellos. Las pastas de té han sido elementos fundamentales en las cocinas afroamericanas durante generaciones.
1803
En este año es donde un pastelero (de origen desconocido) tuvo la brillante idea de añadir a esta masa azúcar y mantequilla. Siendo una auténtica revolución para la pastelería de la época hasta convertirse en alimento de las clases más altas. Esto se debía a que el azúcar por entonces era un bien escaso.
A partir de aquí las pastas de té se han ido perfeccionando a lo largo de la historia. Con nuevos añadidos y modificaciones hasta surgir los diferentes tipos que podemos degustar hoy en día.
Nuestro país
España no es un país que tenga especial relevancia en la historia de las pastas de té. Lo cual no es impedimento a la hora de encontrar este alimento en todo tipo de tiendas. Todos las recordamos presentes en casa de nuestros abuelos y no pueden faltar con el café o un té. Sobre todo, cuando queremos dar ese toque tradicional y artesano que a todo el mundo gusta.
Pero esto no significa que no hayamos grabado nuestra propia historia. En Pastas y Hojaldres Uko llevamos desde 1958 perfeccionando esta técnica para ayudar a mantener viva la historia sobre las pastas de té tradicionales.
¿Qué tipos de pastas de té hay?
Duras
Son las que en su composición llevan más ingredientes sólidos que líquidos. Se amasan y alisan con un rodillo. Una vez se prepara la pasta van al frigo como último paso. Su textura es bastante compacta. En el sabor no se nota tanto la mantequilla como en los otros tipos.
Blandas
En este caso llevan más ingredientes líquidos que sólidos. Es mejor no amasarlas y se pueden servir con una manga pastelera. Estas no vas a la nevera si no que se hornean.
Especiales
Incluimos en este tipo las que llevan hojaldre o merengue. Aunque se pueden encontrar con otros ingredientes como chocolate, fruta, azúcar glas entre otros. Suelen acabar con un horneado. Son más complicadas de hacer por lo que no se suelen ver en tiendas salvo las especializadas. ¡Prueba nuestras Conchas Uko con un praliné de almendra exquisito!
¿Con que se pueden acompañar?
Como su nombre indica el mejor acompañamiento de las pastas de te es con una buena taza de té. Ya sea rojo, verde, blanco, amarillo… cualquier tipo de te las va bien. Como ya hemos explicado su función en la antigüedad era esta. Servir de complemento del té a la nobleza.
Hoy en día se pueden acompañar con cualquier bebida caliente. Ya sea un café, un Cola-Cao o ¡incluso solas! Las pastas de té ya no necesitan de ningún acompañamiento.
Receta Pastas de Té fáciles
Ingredientes:
- 1 taza de mantequilla, atemperada
- 1/2 tazas de azúcar
- 3 huevos grandes (que estén a temperatura ambiente)
- 1 cucharada de extracto de vainilla
- 3 tazas de harina
- 2 cucharaditas de polvo de hornear
- 1/4 cucharadita de sal
Cómo hacer pastas de té
Lo primero es precalentar el horno a 200°. Mientras va alcanzando la temperatura cogemos un tazón grande para batir la mantequilla y el azúcar. Debe quedar suave y esponjoso así que puede que nos lleve sobre los 5 minutos.
Se añaden los huevos, uno a uno, batiendo bien cada uno de ellos. Agregamos la vainilla. Se combina la harina, el polvo de hornear y la sal; Acto seguido añadimos todos esto a la otra masa quedando una uniforme e igual de suave.
Ya podemos formar las pastas encima de una bandeja de horno. Deben estar separadas unos centímetros para que se cocinen bien. Además, la bandeja necesita de una fina capa de aceite.
A los 7-8 minutos se notarán los bordes tostados. Las colocamos sobre una rejilla para un mejor enfriamiento.
Se pueden decorar con chocolate fundido, coco rallado, bolitas de colores…
Preguntas frecuentes
¿Cuánto duran las pastas de té?
En nuestro caso recomendamos consumir preferentemente nuestras pastas antes de los 10-12 meses (se especifica en cada producto). Esto se debe al uso de ingredientes de una amplia duración como puede ser la harina, aceite, azúcar, almendra. Por ello hace que todo el conjunto (pasta final) aguante todo este tiempo como el primer día.
Verás como las pastas industriales aguantan menos. Tal vez en un par de meses estén caducadas. ¿Y eso por qué? Por todo un poco lo que hemos hablado. Además, que no necesitamos añadir ningún extra para que se conserven mejor.
Lo que sí que es conveniente es guardar las pastas de té en un lugar fresco y seco. La humedad es uno de sus grandes enemigos. Todos hemos comido alguna vez una pasta revenida y no es de buen gusto sabiendo lo crujientes que pueden llegar a ser. Lo mejor es dejarlas en su caja, bien cerrada y tapadas en su envoltorio.
¿Hay pastas de te sin azúcar? ¿Y sin gluten?
El tema del azúcar es de vital importancia para personas, por ejemplo, con diabetes. Por ello es fundamente conocer la composición natural del producto. Normalmente el azúcar se sustituye por ciertos edulcorantes.
Por otro lado, para que una pasta de té esté libre de gluten hay que cambiar el uso de una harina, normalmente de trigo, por otra para celiacos como las de arroz, soja, maíz o patata. Por lo demás suelen llevar los mismos ingredientes que una normal como la mantequilla, azúcar, huevos… Además, hoy en día está muy conseguido el sabor y están igual de buenas.
Resumiendo, sí, hay pastas de te sin azúcar y sin gluten. Lo mejor es leer que nos dice el fabricante y buscar los distintivos en el envase para saber si realmente no llevan.
¿Dónde comprar?
Las pastas de té se pueden encontrar en multitud de establecimientos. Desde los supermercados hasta las tiendas especializadas. ¡Y ahí entramos nosotros! Somos especialistas en pastas de té de todo tipo. Desde las más sencillas y clásicas hasta las especiales como nuestro Surtido Uko, Damas o Conchas. Todas ellas elaboradas con la receta de pastas de te tradicional y usando los mejores ingredientes.
Somos Pastas y Hojaldres Uko. Tradición y Dulzura.